Rudy obra el milagro
29-03-2019
El Real Madrid se llevó un partido que tuvo muy cuesta arriba, en una cancha muy difícil. Los Blancos de nuevo comenzaban mal el encuentro en competición europea y tras un mal primer cuarto se iban al banco con una desventaja significativa: 32-14. Muy importante la diferencia y alarmante la cantidad de puntos encajados ante un rival que no es un gran anotador.
A partir de ese momento, trabajo de equipo y una enorme defensa para acercarse en el marcador. A la media parte la diferencia había disminuído (45-33) y se llegaba a los vestuarios con la esperanza de seguir mejorando en la segunda mitad. Y así fue: en el tercer periodo seguía el buen trabajo defensivo y en ataque una buena racha de Llull y un triple sobre la bocina de Yusta ponían el 59-53 en el marcador.
En el tiempo final, los griegos comenzaron ampliando diferencias (71-60, min 35) pero los Blancos apretaron los dientes y creyeron en la remontada, firmando un sensacional 0-10 que les ponía a un solo punto (71-70, min 39). Langford puso el 73-70 con un fade away, y Randolph el 73-71 tras anotar sólo uno de sus tiros libres tras falta recibida.
Pero en la última posesión Rudy Fernández conseguía un triple estratosférico desde más de 8 metros sobre la bocina, para poner el definitivo 73-74 ante la incredulidad de los locales.
A partir de ese momento, trabajo de equipo y una enorme defensa para acercarse en el marcador. A la media parte la diferencia había disminuído (45-33) y se llegaba a los vestuarios con la esperanza de seguir mejorando en la segunda mitad. Y así fue: en el tercer periodo seguía el buen trabajo defensivo y en ataque una buena racha de Llull y un triple sobre la bocina de Yusta ponían el 59-53 en el marcador.
En el tiempo final, los griegos comenzaron ampliando diferencias (71-60, min 35) pero los Blancos apretaron los dientes y creyeron en la remontada, firmando un sensacional 0-10 que les ponía a un solo punto (71-70, min 39). Langford puso el 73-70 con un fade away, y Randolph el 73-71 tras anotar sólo uno de sus tiros libres tras falta recibida.
Pero en la última posesión Rudy Fernández conseguía un triple estratosférico desde más de 8 metros sobre la bocina, para poner el definitivo 73-74 ante la incredulidad de los locales.